Venezuela Real
Información y Opinión
No sólo Chávez
Por Venezuela Real - 18 de Abril, 2007, 9:35, Categoría: Militarización/Militarismo
Ernesto Alvarenga
El Universal 18 de abril de 2007 Todo el que ha participado en la destrucción del país tendrá que asumir su responsabilidad El artículo 328 de la Constitución de 1999 es elocuente: "La Fuerza Armada Nacional constituye una institución esencialmente profesional, sin militancia política, organizada por el Estado para garantizar la independencia y la soberanía de la Nación y asegurar la integridad del espacio geográfico...". Se habla de una FAN al servicio del Estado Nación, cuando el Presidente realiza actos políticos partidistas con la participación activa de militares, no sólo viola la constitución, sino que además utiliza (literalmente) la presencia de éstos como mecanismo de intimidación para todos aquellos venezolanos que no compartimos su proyecto y por ende nos apegamos a los principios fundamentales establecidos en nuestra Carta Magna. Decimos "no sólo Chávez", porque estos eventos cuentan con la presencia de la mayoría del alto mando de la FAN, militares de alto rango, así como representantes de otros poderes públicos que en teoría deberían ser independientes. De no vivir en el mundo bizarro en el cual nos tiene sumergido este régimen, las autoridades competentes deberían haber actuado conforme a la ley adelantando los procesos correspondientes contra el Presidente por la comisión de diversos delitos, entre ellos el uso de la FAN. Esto es mucho pedir, pues quienes tienen esa responsabilidad emplean su tiempo en aplaudir efusivamente los discursos incendiarios del jefe supremo. La destrucción de la República no sólo es responsabilidad de Chávez, sino también de aquellos que alaban sus atropellos y de todo aquel que con un silencio cómplice no asume una posición verdaderamente responsable, patriótica y nacionalista. Estamos en una arremetida por parte del régimen, la confrontación permanente, violencia y agresividad del discurso presidencial así lo evidencian. Ahora el cuento del supuesto intento de magnicidio es denominador común en todos los discursos y además funciona como una especie de chantaje. Los pueblos no olvidan, por más que se manipule la verdad, ésta tarde o temprano aparece. Todo aquel que ha participado en la destrucción de nuestro país tendrá que asumir su responsabilidad. No podrán esconderse detrás del jefe, quien terminará salvándose sólo él, como ocurrió el 4 de febrero del 92 y el 11 de abril del 2002. |
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