Juventud Hood Robin
Por Venezuela Real - 15 de Junio, 2007, 17:39, Categoría: Historia Oficial
Alberto Aranguibel B.
Ultimas Noticias 15 de junio de 2007 Todavía sorprende cómo tanta gente del chavismo llegó tan rápidamente a la conclusión de que detrás de las recientes marchas estudiantiles no existía plan alguno orquestado por sectores golpistas de la oposición, como se ha demostrado de múltiples formas, ni que en ello haya tenido algo que ver el Departamento de Estado norteamericano. Se hace en ese pueril voto de confianza un papel más que ingenuo, toda vez que se incurre en el reiterado error de suponer, una vez más, alguna sana intención en las acciones del oposicionismo. Se cae dolorosamente en la trampa de los estrategas de la CIA, que sólo persiguen sensibilizar a la gente con el manido recurso de la supuesta candidez y la purísima bondad de los jóvenes, de la misma aviesa forma en que se nos intentó vender que los militares golpistas del 11-A accionaron contra el Estado de Derecho porque estaban "preñados de buenas intenciones". Es por lo menos lamentable que se haya desviado la atención al importantísimo tema de la desestabilización soterrada que subyacía en esas aparentemente nobles protestas, cuando había a la mano tantos elementos contundentes para desenmascarar a los mismos farsantes que tanto daño han hecho al país y que hoy, con estas absurdas protestas, pretenden actuar de nuevo para acabar con la paz de los venezolanos, sólo que poniendo esta vez por delante a los jóvenes como carne de cañón. Cayeron todos (empezando por los incautos jóvenes) en el falso juego del supuesto debate por la libertad, cuando en realidad lo que estaba detrás de todo eso era la repugnante defensa de un instrumento de dominación de la oligarquía, como lo fue Rctv. La libertad, como se sabe, es uno de los conceptos más ambiguos del conocimiento humano. Como bien intangible e impreciso, su defensa ha servido desde siempre sólo para apuntalar la hegemonía de los sectores dominantes. Tanto es así que la libertad puede reclamarse en cualquier circunstancia, incluso cuando ésta no sólo no es cercenada, sino que, como en la Venezuela de hoy, es más amplia y más garantizada que nunca. De modo que, al revés de la noble causa de Robin Hood, esas protestas juveniles terminaron siendo sólo una defensa de los ricos en contra de los pobres. |
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