Venezuela Real
Información y Opinión
La obsesión
Por Venezuela Real - 1 de Agosto, 2007, 22:22, Categoría: Libertad de Expresión
Carlos Oteyza
TalCual 01 de agosto de 2007 Ya hace muchos meses, desde el año pasado, el gobierno confesó abiertamente que había medido las posibles consecuencias políticas del cierre de RCTV, y decidió continuar adelante. En su afán, no vanidoso sino político, de hacer desaparecer a RCTVel gobierno devela su voluntad de engullir el poder mediático. Es una necesidad para un proyecto que se ha propuesto permanecer y acapararlo todo en nombre del pueblo. No hay en el campo económico ningún sector, ninguna industria, que compita o ponga en peligro el poder que tiene el Estado petrolero venezolano. En muy pocos países del mundo una industria que apenas tenga una decena de miles de empleados, termina por dar tal poder económico y político al Estado donde opera. Así que quien llega al poder en Venezuela no tiene como necesidad prioritaria fomentar la producción y el comercio de su economía privada, con mantenerla viva le basta y le sirve. Tampoco la tiene que aniquilar. Sin embargo, un medio de comunicación es una piedra en el zapato, es un peligro para un gobierno buchón. Porque usted puede tener todos los reales del mundo, puede regalar los que quiera a sus gobiernos amigos y a los llamados “nuevos socios”, puede becar, financiar, prometer y planificar cuanto plan ideológico o económico quiera, pero mientras existan medios de comunicación donde se ventilen estas acciones, se muestren los errores y corruptelas y se denuncien los crímenes que van quedando impunes, la sociedad queda necesariamente vacunada contra todo intento de continuismo, así sea inmensa la renta petrolera que maneja el gobierno. El asunto de la supervivencia de RCTV no es un asunto de operatividad nacional o internacional, ni de concesiones en regla, ni de la Ley Resorte que no tiene reglamento, ni de exigirles, ahora, nuevos papeles a quienes nunca se les exigieron. El gobierno venezolano, para continuar indefinidamente en el poder, le ha declarado la guerra a la libertad de expresión, de allí que su primer objetivo ha sido el medio independiente con mayor alcance en el país. El regreso de RCTV, aún a cuarto de máquina al reaparecer por la vía del cable, sería todavía un asunto “peligroso” para este régimen. El trago amargo, es decir, el costo político nacional e internacional de tener que seguir persiguiendo a RCTV a pesar de haberla ya vejado y golpeado económicamente, tiene una razón de peso: reducir al máximo las posibilidades de que la violación a la Constitución que se programa pueda ser frenada. La obsesión del poder lleva a la obsesión persecutoria. La llamada “reforma constitucional” obliga al gobierno venezolano a ir al fondo del enjambre leguleyo para golpear de nuevo a RCTV, a la libertad de expresión y al sentimiento democrático de los venezolanos. La obsesión por el poder desnuda al régimen. |
Temas
Calendario
Archivos
SuscríbeteSindicaciónEnlaces
| |||||
