Camino electoral
Por Venezuela Real - 13 de Junio, 2008, 11:51, Categoría: Electorales
MANUEL FELIPE SIERRA
El Nacional 13 de junio de 2008 Chávez ha insistido en que es hora de "radicalizar" el proceso. ¿Cómo se explican entonces la derogación de la Ley de Inteligencia y Contrainteligencia y la nueva postura en sus relaciones con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia? ¿Ello implica una rectificación de fondo? Ambos hechos responden al manejo calculado de una situación que tanto en lo interno como en lo externo se le ha tornado desfavorable. La llamada "Ley Gestapo" era indigerible para la sociedad democrática. Tal como lo señaló el vicepresidente del Partido Socialista Unidos de Venezuela, Alberto Müller Rojas: "Esa ley es aplicable hoy y en el futuro, y en el futuro podemos estar en el otro lado de la acera". Seguramente, la Asamblea Nacional revisará algunos de sus artículos. Sin embargo, sería ingenuo suponer que su esencia sufrirá alteraciones. No se trata de un instrumento aislado, sino que guarda relación con otras leyes, entre ellas, la Ley de Policía Nacional, y que articulan el andamiaje legal del modelo chavista. Por supuesto, con la decisión el oficialismo logra suavizar de alguna manera un cuadro de crispación política de cara a las elecciones del 23 de noviembre y los efectos en términos de popularidad por el desbordamiento de la inflación. El cambio de línea con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, es otra cosa. Son demasiadas las evidencias que comprometen al régimen en las computadoras de Raúl Reyes y en casos recientes como la captura de un militar venezolano en la venta de municiones a los guerrilleros. El "canje humanitario" ya fracasó y su operadora, la senadora Piedad Córdoba, es acusada de traición a la patria en Colombia. En la percepción internacional, Chávez luce todavía asociado a la guerrilla. Las FARC están militarmente resquebrajadas y políticamente aisladas. La jefatura de Alfonso Cano podría inclinarse por iniciar conversaciones con el gobierno de Uribe. Chávez tenía dos caminos: mantener el trato igual significaba compartir las derrotas de los "faracos" y comprometerse cada vez más en el conflicto armado del vecino. Hacer lo que hizo es, sin duda, un retroceso, pero le mejora la imagen en el plano internacional y le ofrece a las FARC un salvavidas, si éstas deciden la vía de la negociación. Un simple repliegue táctico. Y no es la primera vez que lo hace. Pero en ningún caso se trataría de torcer el rumbo de un proyecto que ha venido construyendo con paciencia desde hace casi diez años. |
Temas
Calendario
Archivos
SuscríbeteSindicaciónEnlaces
|